Desde el local de Libertador y Vicente López y Planes, Juan Schneider controla las acciones de Ducati San Isidro, el concesionario oficial de la marca italiana pionero en el país.
“Las ventajas de que Volkswagen, bajo el paraguas de Audi, sea el importador de Ducati, es que contamos con un sistema más grande que nos permite stockearnos con mayores volúmenes de unidades y accesorios, generar mejores acciones de marketing y brindar respuestas inmediatas en la posventa”, reconoce.
¿Cómo se compone su oferta?
Contamos con toda la línea de los modelos de Ducati entre los que sobresale claramente la línea Scrambler, con productos más urbanos y descontracturados que nos abrió la opción a un público que antes no teníamos.
El comprador de estas motos no es el mismo que busca una Ducati tradicional…
Sí y no. También tenemos clientes muy fanáticos que pueden contar con una Scrambler y también una Panigale o una Multistrada.
¿Qué rol juega la personalización?
Muy relevante. Por eso le dedicamos un espacio importante. El mundo Scrambler es infinito y actualmente tenemos la capacidad de armarle la moto a un cliente como él quiera. Para los otros modelos también tenemos muchas piezas, pero en general están más orientadas a la performance que a lo estético.
¿Cómo impacta la evolución del mercado?
El año pasado fue de un crecimiento absoluto, comercializamos cerca de 300 unidades. La Multistrada 950 pegó muy fuerte y recién en diciembre logramos ponernos a tono con la demanda. Este año buscamos alcanzar unos 400 patentamientos.
¿Qué nuevos modelos tienen previstos para alcanzar esa cifra?
Entre abril y mayo llegará la nueva Monster 1200. Para junio vamos a tener la Panigale V4, que toma toda la tecnología del MotoGP, junto con la Multistrada 1260. En Scrambler la gama se completará con la 1100, que es una moto más potente con tres versiones muy completas.
Los consumidores de unidades de este segmento requieren una atención especializada. ¿Qué valor agregado les brindan ustedes?
Alrededor del local se forma un ambiente muy familiar. Por un lado organizamos salidas de diferentes distancias para aquellos que no tienen tiempo de disfrutar su moto durante la semana. Se encuentran con otros apasionados de la marca para hacer viajes o simplemente salir a comer. Además, para la fecha del Moto-
GP siempre organizamos un viaje con todo incluido para ver la carrera y compartir una cena con los pilotos del mundial.