Por Alejandro Fischer (enviado especial a Termas de Río Hondo)
Benedicto Hugo ‘Chiche’ Caldarella es el tester del suplemento de industria de la moto NSR-Clarín. Pero antes fue uno de los protagonistas indiscutidos de la “época de oro” del motociclismo nacional, a comienzos de los años ’60. Además de haber sido campeón argentino y sudamericano es el único argentino que ganó una carrera mundial en la especialidad de velocidad en la máxima categoría, entonces 500 cc, el equivalente a la MotoGP de la actualidad. Fue en octubre de 1962 en el autódromo de la ciudad de Buenos Aires. Además fue campeón europeo en 1964 al ganar 5 de las 6 carreras de la copa Shell.
Hoy, a sus 78 años, sigue dando cátedra en todo tipo de circuito y sobre cualquier tipo de moto.
En el circuito de Termas de Río Hondo tuvo varias observaciones sobre el andar de motos y pilotos, las clasificaciones, y sus pronósticos para la carrera de este domingo.
“Veo que los pilotos cada vez están más involucrados en los desarrollos técnicos de las motos. Prueban constantemente y en cada elemento en particular están a la par del trabajo de los ingenieros y técnicos. Pero también observo que hay mucha especulación entre pilotos y equipos. Van mostrando de a poco lo que tienen y recién en el último momento de la clasificación sacan todo lo que tienen como para sorprender a sus rivales y no darles chances de corrección.
Un dato que impacta es que la velocidad final en este circuito de Termas ya supera los 328 kilómetros por hora (Jack Miller con Ducati Pramac Racing), cuando el año pasado sus colegas llegaban a los 320/324 km/h como velocidad tope.
Claramente, el piloto a imitar, y superar, es Márquez, como en su momento fue Valentino Rossi. El español no le tiene miedo a nada, siempre va a fondo. Si se está por caer sigue acelerando y saca a la moto de esa situación comprometida. Es cierto que varias veces se cae pero eso le sucede en el intento por ir más rápido.
Dovizioso no arrancó muy bien pero al final de las tandas de clasificación lo vi muy firme, en particular en las curvas.
A Valentino lo veo mejor que en Qatar. Y logró una muy buena clasificación y con una ubicación estratégica en la grilla detrás de Márquez y Viñales del lado de afuera. Si logra mantener el ritmo va a estar muy adelante.
Viñales tuvo un andar muy parejo y sólido.
Para la carrera hay un grupo de 8 pilotos (Márquez, Viñales, Dovizioso, Rossi, Miller, Morbidelli, Quartararo y Crutchlow) que están dentro del 1’38 que van a conformar un grupo muy compacto. Veo difícil que alguno se escape y ponga mucha distancia. Imagino una carrera muy cerrada y emocionante. Puede ganar cualquiera de ellos. Incluso, Miller y Morbidelli pueden dar una sorpresa.
Pero la clave será la humedad/lluvia. Este sábado, a la mañana temprano, cuando salió a girar Moto3, el piso estaba bastante húmedo, lo que sumado al poco grip que tenía la pista provocó que varios pilotos patinasen o, directamente, se cayeran. Después fue secando y mejoró. Si llega a llover creo que pilotos como Valentino, Crutchlow, o Miller, pueden tener mejores chances que, por ejemplo, los españoles».